El Día Universal del Niño se celebra todos los años el 20 de noviembre, desde 1954, dedicándolo a cada niño del mundo.
Es un día de celebración por los avances conseguidos, pero sobre todo es un día para llamar la atención sobre la situación de los niños más desfavorecidos, dando a conocer los derechos de la infancia.
El objetivo del Día Universal del Niño es recordar a la ciudadanía que los niños son el colectivo más vulnerable y por tanto el que más sufre las crisis y los problemas del mundo.
Los niños tienen derecho a la salud, la educación y la protección, independientemente del lugar del mundo en el que haya nacido.